Buceando entre Ideas....

No sé cómo describir lo que pueden encontrar aquí, es una mezcla de ideas de la cual me siento bastante orgullosa. No hay un tema específico, simplemente se trata de navegar, o más bien bucear en el mar de las ideas.

Lo único que puedo decirles es que espero que lo disfruten y, por supuesto, los comentarios son bien recibidos.

domingo, 30 de septiembre de 2007

Desafiante...


Desde que vi el cielo oscuro supe que hoy era mi día. La lluvia era magnífica y el tráfico increíble; el tiempo iba en mi contra pero yo iba en contra de todos.



Hoy abrí los ojos y vi la luz, me paré frente al espejo y vi la esencia, comencé a caminar y sentí que corría. Escuché las mismas estupideces de siempre, pero esta vez no entraron en mí, por primera vez les gané.



Hoy el mundo está en mi contra, pero yo estoy en contra suya también. Soy como el mar, enorme, poderoso y rebelde, golpeando con fuerza contra la arena, arrasando con lo que hay en mi camino.



¿Es que acaso es prohibido ir en contra? ¿Es prohibido saber quién soy y hacia dónde voy? Ustedes se creen más poderosos, todos iguales, con sus normas, sus rutinas y su “seguridad”, pero hoy yo soy capaz de romper todas las barreras que han puesto en mi camino, incluso, me di a mi mismo el poder de caminar y hasta volar sobre ellas.



Voy de donde todos vienen, veo lo que no quieren ver, siento lo que ustedes ocultan, pienso en lo que ustedes intentan olvidar. Siento que una fuerza superior se apodera de mí y me hace crecer enormemente.



¿Qué pasa si les digo que no me importa que me odien? Me cansé de ser uno más, me cansé de verme en ustedes. Yo amo la vida, y quiero dejar mi huella en el mundo.



Prometo nunca más pasar por la vida de alguien sin dejarle algo bueno. Quiero ser recordado como un valiente, quiero que recuerden mis risas, mi alegría y mi fortaleza, quiero que me recuerden por quien soy en verdad, no como parte de esta maldita sociedad.

jueves, 27 de septiembre de 2007

Observando desde afuera

Desorden y quietud, es lo que veo ahora que he vuelto a abrir mis ojos en el silencio de nuestro dormitorio. Me levanto y empiezo a recorrer este lugar con la calma con la que nunca antes lo había hecho. Me desplazo lentamente tratando de no lastimarme con los trozos de vidrio que yacen quebrados en el suelo; me detengo y los observo, son las partes de aquel jarrón que perteneció a mi familia durante décadas, nunca te gustó y hoy finalmente, conseguiste deshacerte de él. Por una extraña razón, no me duele ver ese recuerdo hecho trizas, así que sigo mi camino.

Me detengo nuevamente, esta vez en la sala, frente a la pared donde cuelga aquel hermoso retablo del día de nuestra boda, yo, con mi vestido perfectamente blanco y tú, con un elegante traje gris. Fue un bello día, pero qué lejano se encuentra ahora. Miro hacia la derecha y veo mis orquídeas, mi gran pasión, pobres niñas mías poco a poco fueron perdiendo su vida y hoy, finalmente, se encuentran completamente secas, pero, por una extraña razón, tampoco esto me causa dolor ni pesar.

Sé muy bien lo que ha sucedido esta noche, estoy completamente consciente de mi condición, pero aún así no estoy triste ni preocupada. Después del instante en que cerré los ojos justo después de que te escuché salir de esta casa huyendo, como siempre lo has hecho, todas mis preocupaciones se alejaron, y por una razón que desconozco, creo que mis sentimientos también lo hicieron.

Sigo caminando lentamente hasta que llego a la puerta que da al único lugar de esta casa en el que no hay huellas de dolor, el patio, cubierto por el oscuro manto de la noche e iluminado por una hermosa luna llena. En él está Toby realizando su ritual favorito, cazar insectos. Sin embargo, este dulce animalito que siempre ha sido tan dócil conmigo ahora comienza a ladrarme desesperadamente y como no quiero llamar la atención de los vecinos, decido alejarme de él e ignorarlo; pero en el momento en que trato de cerrar la puerta Toby logra colarse y entra a la casa, la atraviesa corriendo y huye hacia la calle por la puerta que no cerraste al salir.
En el breve instante en el que intento perseguir a Toby un vidrio atraviesa mi pie, y es en ese momento cuando comprendo por qué no siento dolor. Ese amargo sentimiento pertenecía a quien yo era antes, pero no a quien soy ahora que he vuelto a abrir los ojos y me he levantado del cuerpo que por años me perteneció.

Mientras miro la puerta aún abierta me pregunto si volverás, tal vez sí, por que has dejado todas tus cosas en esta casa, pero no me importa, cuando vuelvas yo ya no estaré aquí.
Ahora que entro a nuestro dormitorio, el lugar donde comencé este último recorrido observo ese cuerpo -ahora inerte- que te hizo huir, es curioso como huyes de algo que tú mismo provocaste. Es la primera vez que lo observo desde afuera, tan lastimado, tan quieto, tan lleno de dolores.

Siempre dije que Toby era inteligente y tú siempre lo negabas burlándote. Cómo te arrepentirías si lo vieras ahora, ha vuelto, nuestro inteligente animal no pudo callar tu secreto, viene con nuestra vecina. En el rostro de ella la preocupación es evidente al ver el desorden de nuestra sala, está sorprendida pues es la primera vez que lo ve, siempre hice hasta lo imposible para que no lo notara. Toby es listo, la trae a nuestro dormitorio y ella grita desesperadamente al ver el pobre cuerpo vacío de quien tantas veces la invitó a tomar café a esta casa.

domingo, 23 de septiembre de 2007

Negro...


Se abre una puerta y siento que me empujan, no veo nada, absolutamente nada y cierran la puerta tras de mi. Empiezo a caminar a ciegas, extiendo las manos hacia los lados y toco muros a ambos lados, me estoy cuenta de que estoy en un pasillo muy estrecho. Veo hacia arriba y está todo oscuro; camino, camino y camino y empiezo a desesperarme y a sentir miedo porque no veo nada y este pasillo no se acaba.

De pronto se enciende una luz muy tenue y me doy cuenta de que más adelante, a los lados del pasillo hay imágenes negras, hay santos, una virgen y un Cristo pero completamente negros. Sigo caminando y no sé a donde voy, porque la luz tenue que se había encendido no llega hasta este lugar, así que nuevamente no veo nada y tampoco toco nada a los lados del pasillo, sólo la pared, nuevamente.

No sé qué pasa aquí pero siento que voy a perder, esta oscuridad es para mi invencible y me hace imaginarme cosas que me aterran, es horrible, cada vez me siento más débil, no veo nada pero comienzo a imaginar, de repente me parece ver un espejo, ya estoy comenzando a alucinar.
Sigo caminando, cada vez más rápido, ahora corro, ya no me da miedo chocar contra algo porque estoy empezando a creer que voy a pasar el resto de mi vida en este vacío lugar. No hay salida, no hay más luces, no hay más santos, ni siquiera puedo imaginarme una puerta o una salida, me siento débil, la locura comienza a apoderarse de mi y creo que las paredes se hacen cada vez más estrechas y el techo se hace cada vez más bajo. Todo en este lugar (aunque no hay nada) derrocha poder y autoridad. Siento que caigo y caigo y caigo y siento que voy hacia otro mundo…